Psyched Out Grooves From Hungary 69/72

La escena psicodélica que nunca existió: el subtítulo perfecto para esta recopilación. Para empezar, apenas había drogas en Hungría. En esta era, el alcohol, la música y la imaginación han servido como el principal medio de alteración mental entre los jóvenes. El Partido Comunista tenía un firme control de la cultura a través del control monopolista de los lugares, los medios de comunicación y la industria discográfica, los discos occidentales no estaban disponibles, los clubes imponían un estricto código de vestimenta de trajes, camisas y faldas más largas, y la policía acosaba a los jóvenes por no más que tener el pelo largo o usar jeans azules.
Había, sin embargo, una corriente subyacente de bandas semiprofesionales más pequeñas que luchaban por triunfar a la sombra de las pocas estrellas privilegiadas por la única compañía discográfica estatal.
Dadas sus posibilidades de lanzar música, en el mejor de los casos se limitaron a unos pocos sencillos de 7″ a merced de los poderes de dicha compañía discográfica. Psyched Out Grooves de Hungría recopila diez de los sencillos más destacados grabados por los desvalidos de este período. Algunas de las bandas que aparecen aquí eventualmente alcanzaron un mayor éxito al cambiar a estilos más comerciales, como Bergendy, Neoton y Apostol. La mayoría, como Echo, Meteor, Kék Csillag, Non-Stop, fueron formaciones temporales que se disolvieron al cabo de unos años debido a conflictos personales, falta de éxito o ambas cosas. Otros, como Scampolo o Juventus, aguantaron más tiempo sin lograr un avance real. La mayoría de estas bandas nunca tuvieron un repertorio o identidad «psicodélico» consistente y duradero en ningún momento. Estas pistas fueron la excepción, no la norma. Esa coherencia, la ilusión de una escena, proviene de la curación y secuenciación de los jefes de Budabeats, Von Yodi y Gandharva. Es la disposición de estas piezas del rompecabezas lo que las hace encajar. Edición limitada de 300 copias numeradas a mano.
Extracto editado de las notas escritas por Gábor Vályi (Dj Shuriken).