Après La Marée Noire – Vers Une Musique Bretonne

Si el jazz de François Tusques es «libre», su espíritu lo es aún más: después de haber grabado Free Jazz con otros franceses afines (Michel Portal, François Jeanneau, Bernard Vitet, Beb Guérin y Charles Saudrais), el pianista había recorrido mucho terreno, con Barney Wilen (Le Nouveau Jazz) o incluso en solitario (Piano Dazibao y Dazibao Ndeg2), para no repetirse…
En 1971 fundó la Inter Communal Free Dance Music Orchestra que, como dicen las notas de este álbum, «es una interpretación de una música que sintetiza las diferentes comunidades que viven y trabajan en Francia». En 1976, en el primer disco (L’Inter Communal) ya podemos escuchar a Tusques tocando sin fronteras en compañía de Carlos Andreu (voz), Michel Marre (trompeta y saxofón), Jo Maka (saxofón) y Ramadolf (trombón). Es un encuentro entre el jazz y la música de Cataluña, Occitania y África. Hasta aquí todo bien, pero ¿qué pasa con Bretaña, que Tusques se sabe «de memoria»?Habiendo vivido durante mucho tiempo en Nantes, ampliará su «brittanitud» en el canal que une la ciudad con Brest jugando, por ejemplo, con el Diaouled-Ar-Menez. Con estos «diablos de la montaña» que, bajo la batuta de Yann Goasdoué, trabajaron durante los años 1970 en la renovación de la música bretona, Tusques conoció, en particular, a Tanguy Ledoré y lo invitó un día, con trois bombards y algunas gaitas (Jean-Louis Le Vallegant, Gaby Kerdoncuff y Philippe Lestrat), a unirse a las filas de la Intercomunal. Y así se dirigieron hacia una nueva música de Bretaña, como dice el título; ¡Vers une Musique bretonne nouvelle!